Ellos a Tailandia y ellas a Cabo Verde: un turismo de lo romántico, lo sexual y lo peligroso
“Antes de venir, la gente con la que había hablado me decía: ‘Pues ahí son muy guapos todos’. Y yo siempre pensaba: ‘Bueno, puede ser que sean superguapos, pero no son de mi estilo’. … Vi a cuatro niños de nuestra edad y tienen la piel perfecta, los labios perfectos, los ojos, la sonrisa, los dientes…”
Este fragmento proviene de un vídeo viral en TikTok de una joven española con más de 160.000 seguidores, quien describe con entusiasmo su “descubrimiento” estético en Cabo Verde, y da cuenta de cómo se naturaliza una lógica de atracción sexual hacia jóvenes locales. EL ESPAÑOL
Tal tipo de contenido —ligero, aparentemente inofensivo, jocoso— convive con una dimensión más oscura y controversial: el turismo sexual femenino hacia el archipiélago africano. Este artículo explora el fenómeno, sus causas, sus manifestaciones, sus implicaciones éticas y humanas, y las voces que lo denuncian o lo relativizan.
Contexto socioeconómico y legal en Cabo Verde
Para entender por qué Cabo Verde aparece como destino de este tipo de turismo, conviene repasar algunos datos:
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La prostitución en Cabo Verde es legal en términos generales —no hay leyes explícitas que la prohíban—, aunque sí hay normativa que tipifica la prostitución infantil, el tráfico sexual y la explotación sexual. Wikipedia+1
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ONUSIDA estimaba en 1.400 a 1.500 personas dedicadas a la prostitución en el archipiélago, muchas en zonas turísticas como Sal y Santa María, hacia donde convergen visitantes buscando sexo comercial, incluido turismo sexual infantil. Wikipedia+2Wikipedia+2
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La isla de Sal, con sus resorts y discotecas costeras, es frecuentemente señalada como foco de este tipo de dinámicas. EL ESPAÑOL+2Wikipedia+2
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Al mismo tiempo, Cabo Verde enfrenta desafíos estructurales: desempleo juvenil (superior al 20 % en algunas zonas), pobreza persistente, dificultades de movilidad social. En este escenario, la prostitución —de hombres o mujeres— puede convertirse en una estrategia de subsistencia. Vatican News+2El Orden Mundial - EOM+2
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ONG y religiosas en el país reconocen que el turismo sexual (formal o informal) se asocia con la vulnerabilidad: chicos y chicas que reciben regalos, dinero, promesas de viaje o apoyo económico “desde Europa” como parte de la dinámica sentimental o relacional con turistas. EL ESPAÑOL+2Vatican News+2
Este contexto no justifica el turismo sexual ni el abuso, pero ayuda a comprender por qué los desequilibrios estructurales hacen viable que surjan esas relaciones.
Manifestaciones del turismo sexual femenino en Cabo Verde
Relaciones como “acuerdos no explícitos”
No siempre hay contratos formales ni intercambio monetario manifiesto: algunas mujeres declaran no “ir a buscar sexo”, pero terminan en relaciones que incluyen regalos, pagos de hoteles, almuerzos, transporte o remesas periódicas. EL ESPAÑOL+2La Razón+2
En la jerga local se habla de “niños de la Western Union”: jóvenes que reciben dinero o apoyo financiero continuo desde el extranjero como parte de una relación afectiva-sexual. EL ESPAÑOL+1
Algunas de estas relaciones pueden evolucionar en vínculos emocionales a distancia; otras permanecen como encuentros ocasionales o relaciones de dependencia. EL ESPAÑOL+1
Participación de menores
Uno de los aspectos más alarmantes denunciados por ONG y religiosas es la existencia —documentada en algunos casos— de relaciones entre turistas europeas y adolescentes locales, menores de edad. La Razón+2Vatican News+2
Estas relaciones, incluso si no siempre se presentan como prostitución explícita, podrían incurrir en explotación sexual infantil, un delito en Cabo Verde. Wikipedia
Representaciones en redes sociales
Los medios recogen cómo TikTok e Instagram contribuyen a la difusión de una imagen turística exotizante: vídeos de jóvenes europeas bailando en locales, haciendo “descubrimientos” del “prototipo ideal” o resaltando los rasgos físicos de los locales. Los comentarios de emojis (“fuego”, “😍”) y bromas sobre “viajar allí a ligar” aparecen en los comentarios. EL ESPAÑOL
Estas representaciones pueden normalizar la idea de que es perfectamente aceptable que una mujer europea “ligue” con un joven caboverdiano, maquillando dinámicas de desigualdad como si fueran espontáneas o románticas.
Voces críticas, denuncias y reacciones
Religiosas, ONG y activistas locales
Milagros García López es una religiosa española presente en Cabo Verde que ha advertido públicamente sobre el crecimiento del turismo sexual femenino con jóvenes locales. Señala que algunas mujeres “vienen buscando expresamente sexo con chicos jóvenes” o terminan mandando dinero cada mes. EL ESPAÑOL+1
El proyecto Kredita Na Bo (“Cree en ti”) es una iniciativa apoyada por cooperación española para acompañar a mujeres y adolescentes en riesgo, incluyendo víctimas de explotación sexual, tratando de ofrecer alternativas de formación, empleo y protección. La Razón+2Vatican News+2
Otras religiosas cuentan que muchos jóvenes caboverdianos reconocen sentirse atrapados por esa relación simbiótica: recibir regalos o apoyo económico pero también sufrir desgaste emocional. EL ESPAÑOL+2La Razón+2
Activistas locales también alertan del riesgo de invisibilidad institucional: es difícil que sean los gobiernos locales quienes admitan públicamente el fenómeno, porque reconocerlo implicaría cuestionamientos sobre la capacidad del Estado para proteger a sus jóvenes frente al turismo depredador.
En foros y redes: reacciones diversas
Para ilustrar cómo se debate o se banaliza este fenómeno entre usuarios, aquí algunos ejemplos extraídos de foros de viajes o de discusión (algunos más extremos que otros, pero útiles para ver cómo aparece el tema en el discurso común).
“He viajado muchísimo por toda África … es muy normal ver mujeres caucásicas entradas en años con mozalbetes africanos … muchas acuden a simple folleteo.”
— comentario en foro “Turismo sexual” Cotilleando
“El problema que le plantea Senegal a una mujer que viaja sola son los gigolós que se te van a ofrecer, ya que hay muuuuuuuucho turismo sexual femenino…”
— usuario “Kemen”, foro África Occidental Los Viajeros
Aunque estos comentarios no se refieren específicamente a Cabo Verde, muestran que las discusiones sobre turismo sexual femenino no son solo teóricas: están presentes en la mentalidad viajera.
En redes sociales, muchos de estos vídeos sobre “descubrimientos estéticos” reciben comentarios tipo:
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“Me voy para Cabo Verde el mes que viene 😍”
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“Tienes que enseñarnos más fotos de los locales allí 🔥🔥”
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“Pinta como el destino ideal para solteras que quieren pasarlo bien”
Ese tipo de comentarios —ligeros, aparentemente inofensivos— revela cómo se legitima socialmente el turismo sexual femenino bajo la apariencia de “aventura romántica”.
¿Dónde está el límite entre consentimiento, afecto y explotación?
Uno de los desafíos más complejos de este fenómeno es identificar cuándo una relación termina siendo explotación, especialmente cuando los actores involucrados la viven como consensuada. Algunas reflexiones clave:
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Desigualdad estructural: no hay igualdad real entre una turista europea con capacidad económica y un joven local con pocas oportunidades. El desequilibrio de poder, de recursos y opciones de vida ya condiciona la relación.
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Ambigüedad del consentimiento: ¿puede decirse que un menor “consiente” genuinamente cuando enfrenta presiones económicas? ¿Cuánto “consentimiento voluntario” hay cuando la alternativa es no comer o no tener recursos para estudiar?
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Explotación afectiva: regalar, pagar días de hotel, enviar dinero mensualmente o asumir costos de vida es ya una forma de intercambio que puede implicar una forma de prostitución simbólica, aunque no se llame así.
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Estigmas y discursos: muchas mujeres no se perciben como “clientes de prostitución”. Prefieren ver la relación como algo romántico o emocional. Y a muchos jóvenes locales les cuesta verse como víctimas, pues la narrativa dominante les anima a verlo como “oportunidad”.
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Implicaciones legales: cuando hay menores de por medio, la línea se vuelve más clara: el abuso sexual infantil es delito. Si la relación implica tráfico de personas, coacción o explotación, también es perpetrado un crimen en la mayoría de legislaciones, incluida la de Cabo Verde. Wikipedia+2Vatican News+2
Riesgos para los implicados
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Para los jóvenes locales: desgaste psicológico, relaciones de dependencia emocional, estigmatización, embarazos precoces, riesgos sanitarios (ETS), efectos en la reputación personal, trauma afectivo.
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Para las turistas: idealización romántica, enfrentamiento con realidades difíciles, riesgos legales (si intervienen menores o leyes locales), culpabilidad moral o emocional, exposición a engaños o chantajes.
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Para la sociedad local: reproducción de desigualdades, erosión del tejido social, normalización de relaciones mercantiles, presión sobre jóvenes vulnerables para “estar disponibles” para turistas.
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Para el desarrollo sostenible: imagen turística distorsionada, dependencia de este tipo de turismo para ingresos, debilitamiento de otros sectores productivos o culturales.
¿Qué hacer? Algunas propuestas y desafíos
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Mayor visibilización y reconocimiento institucional
Los gobiernos locales, los consulados y los organismos de cooperación deben reconocer públicamente este fenómeno para poder actuar. Si no se habla, difícilmente hay políticas efectivas. -
Protección legal y seguimiento de menores
Asegurar que las leyes sobre explotación sexual infantil y tráfico sean aplicadas, con investigación activa de casos locales donde turistas puedan estar involucrados. -
Educación para turistas y campañas de sensibilización
Antes de viajar, informar sobre los riesgos éticos, legales y humanos de ese tipo de relaciones. Incluir advertencias en material turístico, campañas en redes, formación de agencias de viajes y guías. -
Fortalecimiento de alternativas económicas para jóvenes locales
Crear más oportunidades de empleo, formación técnica, emprendimiento local, turismo comunitario ético, de modo que la dependencia del “encuentro turístico sexual” disminuya. -
Apoyo psicosocial y atención a víctimas
Que ONG, religiosas, instituciones locales cuenten con recursos para acoger, asesorar y acompañar jóvenes que deseen salir de relaciones explotadoras. -
Investigación rigurosa y datos confiables
Hoy hay muchos testimonios, pero pocos estudios cuantitativos sólidos que indiquen escala, edades, patrones, impactos reales. Es necesario más investigación académica con enfoque ético.
Reflexión final
Este fenómeno no encaja cómodamente en los moldes típicos del turismo o del discurso sexual convencional. Se mueve en zonas grises: entre romance y mercantilización, entre deseo y explotación, entre agencia individual y vulnerabilidad estructural.
Que mujeres europeas participen de dinámicas de turismo sexual —no solo como receptoras sino también como “consumidoras activas”— obliga a desdibujar ciertos estereotipos cómodos: no solo los hombres “ricos” viajan buscando sexo con mujeres pobres. Aquí hay una inversión de roles que trae consigo nuevos dilemas morales, leyes insuficientes y silencios complicados.
Detrás de cada tuit, cada vídeo viral o cada comentario ligero como “esa belleza africana” puede esconder una cadena de desigualdades, de relaciones desiguales que afectan la vida de jóvenes con pocas opciones. Y la memoria emocional que queda no es un nuevo viaje exótico: puede ser vergüenza, trauma, dependencia, o simplemente el sacrificio de la dignidad bajo el velo del “amor de vacaciones”.
Si quieres, puedo preparar un reportaje centrado solo en testimonios de jóvenes caboverdianos, o un análisis jurídico de cómo las leyes de Cabo Verde y de España podrían abordarlo. ¿Te lo preparo?
