Coaching TDA-H: Unir lo Desperdigado
Por Jorge Orrego Bravo
Para muchas personas con TDA-H, la vida puede parecer un eterno collage de proyectos a medio hacer, ideas que se dejan en el aire como retazos de un lienzo por completar. La tendencia de comenzar con entusiasmo y luego abandonar antes de llegar al final es algo común, y esos "restos" de creatividad e innovación se acumulan por todas partes. Un libro empezado, una canción que quedó a medias, una receta sin terminar... ¿Quién no tiene un archivo de sueños pendientes? Pero, ¿y si te dijera que ahora es el momento perfecto para reunir todos esos pedazos dispersos y darle forma a una obra maestra?
Imagínate por un momento que esos proyectos abandonados, esos trozos de tu creatividad esparcidos por ahí, pueden convertirse en algo magnífico. Sí, esa vieja idea que olvidaste en el cajón del escritorio, esa afición que dejaste por falta de tiempo o motivación. Ahora, con las herramientas adecuadas, como la inteligencia artificial generativa, es posible darle un impulso a esos proyectos inconclusos. Puede ser que una idea no esté terminada, pero con la ayuda de un algoritmo que "completa" o transforma lo que ya has creado, puedes lograr lo que parecía imposible.
El TDA-H puede hacer que nuestra mente salte de un lado a otro, creando más caos que orden. Pero este desorden no tiene por qué ser un obstáculo. Todo ese torbellino de pensamientos e ideas puede ser el motor que impulse a nuevas creaciones. En lugar de verlo como una debilidad, ¿por qué no convertirlo en una ventaja? Las herramientas de IA no solo te pueden ayudar a organizar ese desorden, sino también a darle coherencia a esos retazos de creatividad que de otro modo se quedarían guardados en el olvido.
El secreto está en aprovechar el caos para darle forma. Quizá tengas una historia que no has terminado de escribir, o un proyecto de arte digital que quedó en pausa. Usar inteligencia artificial no es solo para quienes buscan producir rápidamente. No, se trata de un compañero que te ayuda a recomponer lo que ya has empezado, a darle los toques finales que quizás tú no has podido encontrar, o incluso a enriquecer lo que ya tenías con ideas nuevas. ¿Te imaginas retomando un dibujo que dejaste incompleto y, con un poco de ayuda, haciendo que cobre vida? ¡Es casi como magia!
Si tienes un montón de proyectos por terminar, no te sientas mal por ello. Lo importante es ver todo ese desorden como un punto de partida, no como una meta inalcanzable. La clave está en permitirte rescatar lo que ya está hecho, y darle nueva forma con las herramientas disponibles. Al final, todo ese esfuerzo disperso puede convertirse en una sinfonía de creatividad, organizada y culminada.
Así que, ¿por qué no darle una oportunidad a esos proyectos que alguna vez dejaste atrás? Con un poco de ayuda, puede que descubras que lo que parecía perdido no estaba tan lejos de convertirse en una verdadera obra de arte. Es hora de unir lo desperdigado y ver el conjunto de lo que realmente eres capaz de crear. ¡Nunca es tarde para terminar lo que se empezó!