TDA-H en el adulto: La relación entre la acción, las
pantallas y la adicción
Las pantallas se han convertido en una parte integral de nuestras vidas. Desde teléfonos inteligentes y tabletas hasta computadoras y televisores, pasamos una gran cantidad de tiempo frente a estas pantallas. Para las personas con Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDA-H) en la edad adulta, las pantallas pueden presentar desafíos únicos debido a su potencial adictivo y su impacto en la capacidad de atención y la autorregulación. En este artículo, exploraremos por qué las pantallas pueden ser adictivas y cómo podemos controlar su influencia en el TDA-H en adultos.
El TDA-H y la adicción a las pantallas
El TDA-H se caracteriza por dificultades en la atención
sostenida, la impulsividad y la hiperactividad. Estas características pueden
interactuar con el uso de pantallas de diversas maneras, lo que puede resultar
en una mayor susceptibilidad a la adicción. A continuación, analizaremos
algunas razones por las que las pantallas pueden ser adictivas para las
personas con TDA-H:
Estimulación constante: Las pantallas ofrecen una variedad
de estímulos visuales y auditivos, lo que puede resultar altamente estimulante
para las personas con TDA-H. Esta constante estimulación puede ser atractiva y
difícil de resistir, lo que lleva a un uso excesivo y prolongado de las
pantallas.
Gratificación instantánea: Las actividades en pantalla, como
los juegos, las redes sociales y el consumo de contenido en línea, a menudo
ofrecen recompensas instantáneas. Para las personas con TDA-H, que pueden tener
dificultades para esperar o posponer la gratificación, esta inmediatez puede
resultar altamente adictiva.
Distraibilidad: Las personas con TDA-H suelen tener
dificultades para mantener la atención en una sola tarea durante largos
períodos de tiempo. Las pantallas, con su constante cambio de contenido y
estimulación, pueden ser especialmente atractivas para aquellos que buscan una
distracción rápida y constante.
Hiperfoco: Aunque las personas con TDA-H pueden tener
dificultades para concentrarse en tareas que no les interesan, también pueden
experimentar episodios de hiperfoco en actividades que les resultan altamente
estimulantes. El uso de pantallas, con su naturaleza interactiva y envolvente,
puede desencadenar este hiperfoco y dificultar el control del tiempo y la
moderación.
Cómo controlar la influencia de las pantallas en el TDA-H
Aunque las pantallas pueden ser adictivas y presentar
desafíos para las personas con TDA-H, existen estrategias y enfoques que pueden
ayudar a controlar su influencia. Aquí hay algunas recomendaciones:
Establecer límites de tiempo: Es importante establecer
límites de tiempo para el uso de pantallas. Esto puede incluir períodos
designados sin pantallas, como horas de desconexión antes de acostarse o
momentos específicos durante el día dedicados a actividades sin pantallas.
Utilizar recordatorios y alarmas: Configurar recordatorios y alarmas puede ayudar a controlar el tiempo de uso de las Pantallas. Por ejemplo, puedes configurar una alarma para recordarte que tomes descansos regulares de las pantallas, como levantarte y estirarte cada hora. Esto te ayudará a mantener un equilibrio saludable entre el tiempo de pantalla y otras actividades.
Establecer reglas claras: Es importante establecer reglas
claras en cuanto al uso de pantallas. Estas reglas pueden incluir limitar el
tiempo de pantalla durante los días laborables, evitar el uso de pantallas
durante las comidas o establecer límites en cuanto al tipo de contenido que se
puede consumir en línea. Comunicar estas reglas de manera clara a ti mismo y a
los demás te ayudará a mantener un mayor control sobre el uso de las pantallas.
Practicar la autorregulación: La autorregulación es una
habilidad importante para controlar el uso de las pantallas. Puedes practicar
la autorregulación estableciendo metas personales, como limitar el tiempo de
uso de las pantallas o seguir un horario estructurado. También puedes
experimentar con técnicas de respiración y mindfulness para ayudarte a mantener
la calma y la concentración cuando sientas la tentación de pasar demasiado
tiempo frente a una pantalla.
Buscar alternativas de actividades: En lugar de depender
exclusivamente de las pantallas para el entretenimiento y la estimulación,
busca alternativas de actividades que puedan satisfacer tus necesidades y
ayudarte a mantener la atención. Esto puede incluir actividades físicas, como
el ejercicio regular, hobbies creativos, como la pintura o la música, o incluso
la lectura de libros impresos. Explora diferentes actividades y encuentra
aquellas que te brinden satisfacción y ayuden a reducir la dependencia de las
pantallas.
Buscar apoyo profesional: Si sientes que la adicción a las
pantallas está afectando significativamente tu vida y tu capacidad para
funcionar de manera óptima, considera buscar apoyo profesional. Un terapeuta o
especialista en salud mental puede ayudarte a desarrollar estrategias más
específicas y personalizadas para controlar el uso de las pantallas y abordar
cualquier problema subyacente relacionado con el TDA-H.
En resumen, las pantallas pueden presentar desafíos para las personas con TDA-H debido a su naturaleza adictiva y estimulante. Sin embargo, con la implementación de estrategias adecuadas, es posible controlar la influencia de las pantallas y encontrar un equilibrio saludable. Establecer límites de tiempo, practicar la autorregulación y buscar alternativas de actividades pueden ser pasos importantes para controlar el uso de las pantallas y mantener una vida equilibrada y satisfactoria. Recuerda que buscar apoyo profesional también puede ser beneficioso para abordar cualquier problema subyacente y recibir orientación específica para tu situación.