¿Cómo se le podría llamar al TDAH en el futuro? problemas con
la definición actual
En vista de los desafíos y las críticas relacionadas con la definición actual del Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDA-H), ha habido propuestas para explorar nuevas formas de conceptualizar y denominar este trastorno en el futuro. A continuación, se presentan algunas ideas que se han planteado en relación con este tema:
Trastorno de la regulación cognitiva: Algunos expertos
sugieren que el TDA-H podría ser visto como un trastorno de la regulación
cognitiva, enfatizando así los desafíos relacionados con la atención, la
impulsividad y la hiperactividad. Esta denominación busca resaltar la
dificultad que tienen las personas con TDA-H para regular y controlar sus
procesos cognitivos.
Síndrome de disfunción ejecutiva: Otro enfoque propone
denominar al TDA-H como un síndrome de disfunción ejecutiva, enfocándose en las
dificultades que las personas experimentan en las funciones ejecutivas del
cerebro, como la planificación, la organización, la flexibilidad mental y la
autorregulación.
Variabilidad neurocognitiva: Esta perspectiva se centra en
reconocer la amplia variabilidad en las habilidades cognitivas de las personas
con TDA-H. En lugar de enfocarse en las limitaciones o déficits, se resalta la
diversidad y la variabilidad en las fortalezas y debilidades neurocognitivas.
Trastorno de autorregulación: Algunos investigadores
sugieren que el TDA-H podría ser considerado como un trastorno de
autorregulación, ya que las dificultades en el control de la atención, la
impulsividad y la hiperactividad están relacionadas con problemas en la
autorregulación emocional, conductual y cognitiva.
Dificultades de atención y autoregulación: Esta denominación
engloba las dificultades en la atención y la autorregulación, poniendo énfasis
en los desafíos que enfrentan las personas con TDA-H para regular sus estados
internos y adaptarse a diferentes situaciones.
Es importante tener en cuenta que estas propuestas están en
etapas iniciales y aún no han sido adoptadas de manera generalizada. El
objetivo de estas ideas es mejorar la comprensión y el abordaje del trastorno,
centrándose en aspectos clave como la regulación cognitiva, las funciones
ejecutivas y la autorregulación. Sin embargo, cualquier cambio en la definición
y la terminología del TDA-H requiere una evaluación cuidadosa y una base sólida
de evidencia científica para garantizar una comprensión precisa del trastorno y
un enfoque adecuado en su diagnóstico y tratamiento.
En última instancia, el futuro del TDA-H dependerá de la evolución continua de la investigación y el diálogo entre los profesionales de la salud mental, los investigadores y las personas afectadas por el trastorno. Es fundamental promover un enfoque integrador que considere la complejidad de los síntomas y las necesidades individuales, buscando siempre mejorar la comprensión y el apoyo a aquellos que viven con TDA-H.