Introducción al modelo cognitivo en el TDAH
en Adultos
Filosofar
es esto: examinar y afinar los criterios. Epicteto
Debido a cómo operan las funciones
ejecutivas en las personas adultas con TDAH y a las huellas emocionales
que el trastorno ha dejado, éstas tienen tendencia a tener pensamientos
automáticos inútiles o disfuncionales que pueden desembocar en ansiedad o
depresión. Estos pensamientos funcionan como un radar de amenazas para evitar
el fracaso, el rechazo, o el peligro inmediato, pero aseguran el sufrimiento a
largo plazo. Te invitamos a comenzar a investigar cuales son las trampas de
estos pensamientos y al final te sugerimos un ejercicio práctico.
Metas:
-Conocerás el concepto de pensamiento
automático negativo
-Reconocerás cuál es su relación con el TDAH
-Empezarás a identificar cuáles son las
trampas de los pensamientos
Palabras claves: pensamiento automático
negativo, trampas de pensamiento, modelo cognitivo, tdah adultos
(Jorge Orrego)
Muchas personas con TDAH pueden tener la
tendencia a sufrir de depresión o ansiedad. ¿Por qué?
Las
personas con TDAH tienen una forma especial de pensar y de regular sus
emociones en comparación a las personas sin esta condición. Esto es debido al
diferente funcionamiento de su neurobiología y una muy probable historia de
fracasos y frustraciones previas. Muchos pensamientos tienen la tendencia a ser
automáticos y negativos entrando en un círculo mental que desemboca en ansiedad
o depresión, u otros trastornos asociados, que pueden afectar el síndrome. Los
pensamientos automáticos ocurren a todos los seres humanos y tienen una
característica sorprendente que es la de conectar palabras, imágenes con
recuerdos y experiencia propia o de lo demás. La mente de cualquier persona
tiene una gran cantidad de información relacionada por asociación. Estas
asociaciones son automáticas, sobre todo cuando los pensamientos son negativos.
Los pensamientos automáticos son mensajes específicos e internos. A menudo
aparecen como un flash instantáneo. Los pensamientos automáticos negativos son,
casi siempre, irracionales y funcionan como una voz en off permanente, y
casi siempre resultan creíbles. La experiencia de vida de una persona con
TDAH es muy importante para entender su visión de la misma y sus creencias.
Las
personas con TDAH pueden tener dificultades para focalizarse en una
conversación, en leer y llenar formularios, en el rendimiento académico, en
cumplir plazos y en lograr objetivos. Estos límites conductuales afectan
a la seguridad de la persona en sus capacidades aumentando su estrés. Si una
persona con TDAH, además ha nacido en un ambiente nervioso y/o disfuncional, es
muy probable que unos aspectos de su identidad estén predispuestos a sufrir
depresión, ansiedad o abuso de sustancias. El círculo de los
pensamientos automáticos negativos afecta a la lucidez de la persona llevándola
a la tristeza, depresión, preocupación, estrés y agobio. Es muy fácil que se
pueda formar un estrés crónico que influirá en la manera de actuar, sobre todo
si nunca se trató el trastorno.
A
las personas con TDAH, las actividades del lóbulo frontal -la parte del cerebro
que dirige las conductas conscientes- les funcionan de una manera diferente.
Las funciones ejecutivas incluyen la memoria de trabajo, la organización, la
habilidad para autorregular las emociones y la motivación y finalmente la
habilidad para solucionar problemas. El estrés en sí mismo disminuye estas
funciones a todos los seres humanos, por esta razón los que tienen el TDAH
están más predispuestos a sufrir de tensión o ansiedad, y a su vez la ansiedad
o depresión afectan negativamente al trastorno. Es muy probable que las
personas con TDAH se vean afectadas por los fracasos que vivieron en sus vidas,
por conductas impulsivas y sus consecuencias, por no acabar las tareas, la
conducta en la escuela, la dificultad en estudiar o prestar atención, los
despistes, la crítica y juicios de los demás, generando una gran frustración.
Estos ejemplos llevan a las personas a no sentirse seguras de sí mismas,
aumentando el círculo de la tensión. Se puede llegar a pensar que “no soy
capaz”, renunciando por ejemplo a ir a la escuela. Esto aumenta la inseguridad,
la baja autoestima, la desmotivación y la desconfianza de la propia manera de
ser.
¿Qué significa que los pensamientos son un
sistema de alarma?
Una de las características del síndrome es la
presencia de pensamientos automáticos que transmiten amenaza y peligro. El
cerebro de una persona con TDAH percibe amenazas antes que se vivan estos hechos,
el peligro de sus consecuencias y las que pueden afectar el futuro. Por esto
las personas con TDAH se construyen automáticamente un sistema de alarma que
valora e identifica las posibles amenazas.
Este sistema de alarma se activa fácilmente por el
hecho de asociar situaciones, objetos, pensamientos y emociones. Por ejemplo,
si un amigo nos cuenta una historia peligrosa que vivió, nosotros sin siquiera
haber vivido en primera persona esa experiencia, podemos asociarla a
situaciones que evoquen peligro. Es un sistema de alarma que se activa
involuntariamente sobre todo en las situaciones donde es necesario tomar una
decisión.
Los
pensamientos trampa
Los pensamientos trampa reflejan nuestra actitud,
creencias y convicciones influenciando la verdadera visión de la realidad. De
hecho, los pensamientos trampa son tipos de pensamientos que impiden ver
objetivamente las situaciones. Estos tipos de pensamientos más comunes se
caracterizan siempre en dos o tres categorías: o es blanco o es negro, o eres
delgado o gordo, o eres tonto o inteligente. Estos pensamientos ponen
límites a las situaciones.
Todas las personas tienen estos tipos de pensamientos
pero las personas con TDAH no tratado, que suelen ser más inseguras y con baja
autoestima por sus fracasos históricos, alimentan mayormente los círculos de
los pensamientos automáticos negativos, creando trampas negativas. Sobretodo
quién sufre de depresión suele acordarse solo del lado negativo, aún cuando le
pasa algo positivo.
Otra tendencia común es la de generalizar. Por
ejemplo, quien sufre de insomnio dirá que ha dormido poco incluso el día que
logró dormir mucho (generalización negativa). Quién tiene el trastorno suele
generalizar o hablar en términos extremos, como o “todo o nada”, “no le
gusto a nadie” (no le gusto a nadie entonces me quedo en casa y no voy a la
fiesta), “yo quiero ser querido por todos”. Además, se puede generalizar por el
miedo de los juicios que es una fuente de sufrimientos y de inseguridad. Suelen
existir dos tipos de juicios: hacia los demás y hacia sí mismo. En este último
caso, si la persona se critica negativamente puede ser contraproducente por su
seguridad y autoestima, sobre todo cuando visualiza con la imaginación
historias o juicios de las personas hacia sí mismos, influenciando la
percepción de su ser, que se queda enfocada en los aspectos del carácter más
negativos. Generalmente, estos pensamientos trampa son traicioneros: son
automáticos, breves, ilógicos, inadecuados y a menudo no perciben la verdadera
realidad de los hechos, agrandando las sensaciones. Cuando estás con alguien
los pensamientos están relacionados y cuando estás solo llegan los pensamientos
íntimos que pueden ser molestos o negativos. No es posible controlarlos pero es
posible poner una contra tendencia con las propias metas, objetivos y valores.
Podemos describir 4 grupos de pensamientos:
-Pensamientos necesarios (nuestra vida diaria)
-Pensamiento innecesarios (se enfocan en el pasado y
en el futuro: ejemplo: ¿por qué lo hice?
Le damos la vuelta…)
-Pensamientos negativos (dañan a nosotros y
quien nos rodea/ preocupaciones por el pasado/ intranquilidad por el
futuro)
-Pensamientos positivos (son constructivos, dan
beneficio y aportan fortaleza interior)
Los pensamientos innecesarios y negativos pueden crear
los pensamientos trampas. Estos últimos podrían ser influenciados por factores
internos:
-Las creencias (pensamientos arraigados que nos
condicionan)
-Suposiciones o prejuicios (ponemos etiquetas o
sentimientos de juicios)
-Memoria asociada (la experiencia pasada negativa
lleva al rechazo de una situación parecida)
-Patrones o límites mentales (visión limitada que se
mantiene y se repite)
Y por factores externos:
-El tiempo
- Las circunstancias
- Medios de comunicación
-Posesión (el miedo de perder algo)
-Relaciones (influencias opiniones y expectativas)
Una pregunta inteligente que puede responder a los
pensamientos trampa podría ser “¿Por qué pienso lo que pienso y no pienso en
otra cosa?”. Nosotros mismos somos los creadores de nuestros pensamientos
y cambiar lo que sea automático y negativo significa cambiar nuestras creencias
negativas arraigadas por las experiencias negativas del pasado. Sería
importante aprovechar de las situaciones vividas, enfocando la mente en lo que
hemos aprendido y no en lo que hemos sufrido. Esto ayudará a dirigir los
pensamientos positivos para tener más valor, fortalecimiento y seguridad.
¡Si
quieres comprender, Haz!
¿Cuál son las preguntas útiles para examinar nuestros
pensamientos automáticos negativos?
Todos los pensamientos automáticos negativos incluyen
los sentimientos. Para entender los errores de pensamientos es muy importante
separar las emociones de los pensamientos. Para alejarse de los pensamientos
trampa sería muy útil escribirlos en un papel o desarrollar una hoja de
registro donde se explica
1) la situación
2) los pensamientos
3) las emociones
4) las respuestas alternativas a los errores de los
pensamientos
Generalmente, se cree que los pensamientos son hechos
verdaderos cuando en realidad representan opiniones y creencias. Creemos que lo
que pensamos es la verdad, sin considerar que también puede ser de otra manera.
Las preguntas que nos pueden ayudar en reflexionar y
sentirse mejor frente a una situación pueden ser las siguientes:
-¿Qué evidencia hay que de que esto sea un pensamiento
verdadero?
-¿Cuál es mi papel sobre esta situación?
-¿Qué es la peor cosa que puede ocurrir?
-¿Esta situación ha tomado una importancia
desmesurada?
-¿Hice todo lo que podía hacer para controlarla?
-¿Mi opinión se está transformando realmente?
-¿Me estoy preocupando demasiado de esta situación?
-¿Que me diría un amigo sobre esto?
-¿Qué le diría yo a un buen amigo si se encontrara en
esta situación?
Mantener el control sobre los pensamientos no es fácil
sobre todo para quién tiene el TDAH. Los pensamientos automáticos pueden
controlarse a través de la propia actitud, pero hasta un cierto punto. Si se reconocen
los pensamientos trampa sería importante pararse y reflexionar cuestionando a
sí mismo sobre lo que se está percibiendo. Identificarlos para mirarlos desde
una perspectiva más lejana puede ayudar a romper el círculo automático. Cuando
se viven situaciones de estrés es muy importante entender si los pensamientos
dirigen lo que hacemos o si lo que hacemos dirigen nuestros pensamientos.
Guendalina Troiani
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