martes, octubre 18, 2011


Déficit atencional se puede diagnosticar y tratar desde los cuatro años de edad

Academia Americana de Pediatría adelantó edad para advertir condición de los seis a los cuatro años.
por Cecilia Yáñez
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Hasta ahora, aun cuando un niño pudiera tener dificultades para poner atención a un solo estímulo, problemas de comportamiento o aprendizaje, los especialistas solían esperar hasta los seis años antes de diagnosticar un déficit atencional con hiperactividad (TDAH). Sólo en casos excepcionales se iniciaba un tratamiento para esta condición antes de esa edad.
Pero los últimos estudios y la práctica clínica hicieron que las recomendaciones de manejo cambiaran. Una de las últimas fue hecha por la Academia de Pediatría Americana (APP) en su Conferencia Nacional realizada el fin de semana en Boston (EE.UU), donde un grupo de 14 expertos dio a conocer un nuevo informe, TDAH: Guía de Práctica Clínica para el Diagnóstico, Evaluación y Tratamiento de Niños y Adolescentes con Trastorno de Atención, un texto de 20 páginas que da nuevas sugerencias a los especialistas frente a esta condición.
Lo más novedoso es que si antes la recomendación de diagnóstico era entre los seis y los 12 años, ahora es desde los cuatro e, incluso, se puede hacer hasta los 18 años. "Tratar a los niños a una edad temprana es importante, porque cuando podemos identificar con antelación y proporcionar el tratamiento apropiado, aumentan sus posibilidades de éxito en la escuela", dice el doctor Mark Wolraich, autor principal del informe.
Para los niños más pequeños, la AAP recomienda a los médicos intentar primero una intervención conductual, con énfasis en la entrega de habilidades y técnicas de manejo de comportamiento a los padres. Sólo en los casos con síntomas más severos se considera medicación, comenzando siempre por las dosis más bajas, dice el documento.
Para los niños de educación primaria y adolescentes (seis a 18 años), la AAP recomienda fármacos aprobados por la FDA y terapia conductual, y en lo posible, los dos combinados. En esta actualización, la AAP hace un fuerte hincapié en la ayuda al diagnóstico y tratamiento que puedan aportar profesores, padres y otros especialistas que tratan con el niño. "Como esta condición es crónica, requiere un enfoque de equipo, incluidos los pacientes, sus padres, el pediatra, terapeutas y maestros", explica Wolraich.
Beneficios
Según el pediatra del Hospital Clínico de la U. de Chile, Roberto Balassa, en la práctica clínica, el diagnóstico ya se hacía a una edad más temprana. "Hay niños muy pequeños con síntomas. Son muy inquietos, como un torbellino, desesperan a sus padres", señala. En ellos se puede sospechar de un TDAH y pedir evaluaciones, conversar con los padres y ver qué está pasando con el niño. "Es un esfuerzo combinado entre pediatra, neurólogo, padres, profesores, sicólogos y sicopedagogos", reconoce.
A juicio de Alicia Jofré, sicopedagoga y académica de la U. Andrés Bello, un diagnóstico más temprano ayuda a que cuando se inicie el período escolar, ellos lleguen en las mismas condiciones que el resto de sus compañeros. "Muchas veces, el niño con TDAH es diagnosticado cuando ya está en el colegio y tiene problemas de aprendizaje, pero se han perdido años valiosos en los que no era tan evidente su condición, pero se podría haber tratado", explica.
Otro aspecto es el conductual. Para el neurólogo infantil de la Clínica Alemana Marcos Manríquez, con los niños más pequeños se debe ser más cuidadoso. Se evalúa durante más tiempo antes de diagnosticar y al comienzo se indica un manejo de comportamiento para los papás y el niño, que realiza un sicólogo. A su juicio, el tratamiento temprano también podría evitar problemas emocionales de estos niños, porque son muchos los que de pequeños presentan problemas de comportamiento, son agresivos y crecen con el rótulo de molestosos, inquietos, complicados. "Ellos se dan cuenta que son distintos, que los retan más y eso puede repercutir en el concepto que ellos tienen de sí mismos y su autoestima", explica Manríquez.
El TDAH es un trastorno neuroconductual genético que afecta a niños, adolescentes y también adultos, y que se caracteriza por la incapacidad de las personas para concentrarse en una sola actividad, complicando su vida académica y la relación con los otros, porque tienen dificultades para seguir instrucciones, completar tareas y planificar acciones. Se estima que alrededor de un 6% de los niños y un 8% de los estudiantes universitarios del país sufren TDAH.
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